Sobre la 01:30 de la madrugada se ha producido un nuevo derrumbe de varias piedras y escombros que ha alertado a los vecinos más cercanos a la calle Penilla. Es importante destacar que este no es un evento aislado: el 18 de noviembre de 2024 ya se produjo un desprendimiento mayor en el mismo inmueble.

Esta vez fue necesaria la intervención de los bomberos del SEPEIS de la Diputación de León, procedentes de la estación de Vidanes, y de una patrulla de la Guardia Civil debido a las continuas caídas de piedras. Después de inspeccionar el inmueble, se cortó un tramo de la calle Penilla para evitar que se produzcan daños personales.

Ante el abandono de los propietarios, los sentimientos de los vecinos son claros: "Esperamos que el Ayuntamiento de Cistierna tome cartas en el asunto, porque es realmente peligroso pasar por los alrededores de esta calle", afirman. "Hemos tenido suerte que la mayoría de los desprendimientos se han producido por la noche, pero si le cae a un niño o a cualquiera en plena luz del día... Luego nos lamentaremos", comentaba una vecina preocupada.

Por su parte, los bomberos elaborarán un informe de la situación para que el Ayuntamiento inicie el trámite de expediente en ruina, a partir del cual los propietarios disponen de un plazo para tomar las acciones que consideren oportunas. En caso de que los propietarios no realizasen ninguna reparación o demolición, sería el Ayuntamiento el encargado de hacerlo.

El caído durante la noche no es el único inmueble en un estado deplorable en esta calle. Hay otras tres propiedades en mal estado, de las que se desprenden continuamente piedras y tejas.